LA RED DEL INSPECTOR GENERAL

Para preservar su función de supervisión objetiva, RTC no participa de modo alguno en la administración de las iglesias o en la entrega de Dianética y Scientology a los feligreses. Por lo tanto, esas responsabilidades caen directamente sobre los hombros de CSI, quien supervisa la administración eclesiástica de todas las iglesias de Scientology, así como también de la diseminación y propagación de la religión.

RTC está aparte como un cuerpo externo que protege la religión de Scientology y actúa como árbitro final de la ortodoxia. En el vértice de esta función principal está la Red del Inspector General de RTC que opera desde siete oficinas en cuatro continentes. Los deberes y autoridad de un Inspector General de RTC son muy similares a aquellos tradicionalmente asociados con el título de inspector general en otras organizaciones. Concretamente, un inspector general investiga y corrige instancias en las cuales el desviarse de una política estándar o ética pudiera traicionar el servicio de una organización para con su público constituyente.